Los directores alemanes siempre se han caracterizado por realizar interesantes propuestas visuales, entre ellos destaca el galardonado director Werner Herzog quien a lado de su alter ego Klaus Kinski presentaron un filme por demás especial…de esos en lo que el personaje principal te causa sensaciones.

Brian Sweeney Fitzgerald mejor conocido como Fitzcarraldo es un hombre que ama la ópera y quiere llevarla por todo el amazonas, a bordo de un teatro flotante, que es un pequeño barco del que Fitzcarraldo se hace gracias a los negocios del caucho.

Para zarpar su barco Fitzcarraldo tuvo que enfrentar grandes obstáculos, como transportarlo a través de una pequeña montaña, este reto traspaso la pantalla ya que realmente se tuvo que transportar de este modo el barco, lo cual casi cuesta la vida de varios miembros del rodaje, finalmente al igual que en la historia el equipo de producción logro concluir la tarea y el teatro flotante realizó su aparición a lo largo del amazonas, deleitando a todos con las hermosas melodías que tanto gustaban a Fitzcarraldo.

La pasión y entrega de nuestro personaje principal se refuerzan con una banda sonora clásica y étnica que contiene música de Popol Vuh, más específicamente de los álbumes Die Nacht der Seele (1979) y Sei still, wisse ich bin (1981), interpretados por Enrico Caruso. Además se recurre a extractos de Ernani de Verdi, Pagliacci (“Ridi, Pagliaccio) de Leoncavallo, La bohème de Puccini, I puritani de Bellini y del trabajo orquestal Muerte y transfiguración de Richard Strauss.

Entre las curiosidades del filme encontramos que el buen y temperamental Klaus Kinski no estaba considerado para el papel protagónico. Fue cuando Jason Robards enfermó de disentería que Herzog consideró a Jack Nicholson e incluso interpretarlo él mismo. Finalmente el papel fue para Kinski quien tuvo muchos problemas en diferencias de opinión con el director, llegando a agredirlo hasta los golpes, de ahí surge el conocido documental “Mi enemigo íntimo” que nos muestra de primera mano, la destructiva relación de director y actor durante el rodaje de Fitzcarraldo. También entre el elenco se tenía previsto al mismísimo Mick Jagger para encarnar el personaje de Wilbur, el asistente de Fitzcarraldo, pero al retrasarse el rodaje, Jagger tuvo que desistir en su participación para Herzog.

Fitzcarraldo ganó una «categoría de plata» en los Deutscher Filmpreis por mejor película extranjera, ganó un premio al mejor director para Herzog en el Festival de Cannes. Y fue nominada a los premios BAFTA y Globo de Oro en la categoría por mejor película extranjera, y una Palma de Oro en el Festival de Cannes.

Claro que lo mejor de esta película y lo que hace que nos contagie esa pasión en la busca de la realización de los sueños radica en que Fitzcarraldo esta basada en la hazaña de comerciante cauchero peruano de origen irlandés llamado Carlos Fermín Fitzcarrald.

No les cuento más, y los dejo disfrutar de la Banda Sonora de la Semana: FITZCARRALDO.