Qué director no desearía tener un elenco lleno de grandes actores, diverso y de la magnitud de los siguientes: Kate Winslet, Keira Knightley, Helen Mirren, Will Smith, Naomie Harries, Edward Norton, Ann Dowd, Michael Peña, Jacob Latimore. Pues el director de dramas y comedias con mensajes positivos David Frankel, reúne a tal elenco para una película más de esta época decembrina y es imposible imaginar que se saldrá de lo que nos tiene acostumbrados en sus trabajos anteriores, que incluye a Marley y yo, Mi gran oportunidad por mencionar algunas. Para esta ocasión nos trae Belleza inesperada, un drama con tintes trágicos y mensaje esperanzador.
Howard, el jefe de una agencia de publicidad quien tras experimentar una tragedia no se comporta de una manera adecuada, lo que pone en riesgo el futuro de esta agencia. Por ello, sus socios y amigos, Claire, Whit y Simon, pondrán en marcha un plan que involucra una serie de cartas que el escribió desafiando a la Muerte, al Tiempo y al Amor y la ayuda de un grupo peculiar de teatro. Y durante esta travesía tanto el protagonista como sus amigos, irán descubriendo aquellos momentos en los que existe un significado oculto y lleno de belleza, que en ocasiones no logramos ver.
Si bien ya mencioné que el elenco es espectacular el cual no necesita un papel tan especial para lucirse y demostrar su talento, es siempre una buena razón para verlos y ver como interactúan a pesar del tipo de película en la que se ven involucrados. Sin embargo, aunque la mayoría están estupendos el que no logra captar bien la esencia de su personaje es Will Smith, al cual ya cansa verlo en el mismo rol de persona sufrida que no sale de puras tragedias y que busca de cierta manera una respuesta a sus problemas a lo largo del metraje, o bien si no busca respuesta de cierta manera busca redención. En esta película es el mismo caso que ya hemos visto en Busca de la Felicidad, Siete almas entre otras.
A pesar de contar con un buen elenco, que es lo único que le veo de positivo, la película tiene intenciones de ser drama para llorar y reflexionar sobre nuestras vidas y decisiones, lo que la convierte en una película manipuladora, con mensaje abiertamente lacrimógeno y lleno de sensiblería, que pretende que caigamos en su trampa para terminar totalmente rendidos y comprando lo que quiere dar a entender. Además que su guionista, Allan Loeb no muestra una historia tan original que al final no podremos dejar de comparar con muchas historias navideñas ya mostradas a la largo de la historia.
David Frankel logra una película que capta la atención del espectador y envuelve, pero este tendrá la última palabra al decidir si caerá en el juego que nos muestran o saldrá al final, con la sensación de haber visto una película que desde un inicio logra ocultar lo ñoña y predecible que resulta ser.
- Elenco, excepto Will Smith
- Mensaje e intenciones