Disney no es el único que se atrevió a reinventar los cuentos de Hadas que todos disfrutamos de niños, hace cuatro años Universal trajo a la pantalla grande la versión live-action de Blanca Nieves, una versión más oscura y que presentó a la protagonista como una guerrera, llamada Blanca Nieves y el Cazador. Después del éxito que resultó la película y también reconocimiento a su vestuarista (Collen Atwood) en una nominación al Oscar y a los efectos visuales, se dio luz verde a la secuela. Pero después de ciertos rumores y luego confirmaciones sobre la relación de la actriz, Kristen Stewart y el directo de esta Rupert Sanders, el estudio tomó la decisión de continuar la historia pero ya sin ellos, para mostrarnos la vida anterior de El Cazador, (Chris Hemsworth) e ingresar nuevos personajes descantando cualquier regreso de Blanca Nieves. Además de contrar con Cedric Nicolas-Toyan como director, el encargado de dirigir el departamento de efectos visuales, pero primerizo como director. Toda esta situación ahora se ve reflejada en el resultado final de esta saga.
El cazador y la reina de Hielo, introduce a Freya (Emily Blunt), la hermana de Ravena ( Charlize Theron en su mismo papel como la bruja que le hace la vida imposible a Blanca Nieves), que mucho antes de los suceso de Blanca Nieves, se ve obligada a huir de su hermana por un amor no consumado y guardarse en el Norte del Reino, al descubrir sus poderes. Freya decida a que nadie se enamore, reclutara a varios niños que entrenara para conquistar reinos y desaparecer el amor, pero estos niños la desafiaran al crecer. Estos son Eric, el cazador de la anterior entrega y Sara, su prohibido amor. Ambos desafiaran a Freya para no alcanzar sus planes, mientras que se dan cuenta qué ha pasado años después con el espejo de Ravenna.
La película tiene un gran elenco, donde sobresale Charlize Theron, solo porque le queda perfecto el papel, más en tanto Emily Blunt y Jessica Chastain, son despediciadas en sus papeles tan mediocres. Porque esto es la película. No se puede rescatar mucho. Además de apreciar los grandes vestuarios. Pero la situación que no se puede apreciar mucho es por una historia tan floja como su mensaje y tan falsa como los acentos de sus protagonistas. Y como lo mencioné al principio, la situación es que en aún ausencia de Blanca Nieves, la cual no importa por la persona que la interpretaba, es que quieren expandir un universo que era mejor quedar como estaba, porque al ingresar un personaje como Freya no se siente nada original y es imposible no comparar con otras películas con este tipo de personajes, incluyendo filmes animados como Frozen.
Otro cambio que se siente es el director, porque se siente que sí vemos una película de un primerizo que no sabe ofrecer mucho con una historia tan mal desarrollada, además que su ausencia como supervisor de efectos visuales se siente. Porque al ver los de esta película pareciera que fueron hechos de manera apresurada y sin detalles como en la anterior entrega. En general, es esta película que después de todos los problemas involucrados deberían cancelar y no continuar, pero ya veremos lo que diga el público diga en taquilla.
- Charlize Theron
- Vestuarios
- Efectos Visuales
- Los acentos falsos de todos