Las historias de Agatha Christiesiempre han sido grandes fuentes de inspiración para muchas adaptaciones dentro del cine. Durante las décadas de los 60 y 80 fue cuando se filmaron la gran mayoría, además de las obras más reconocidas de esta escritora. Fue en 1974 que apareció la primera adaptación de Asesinato en el Expreso de Oriente, la cual contó con un gran elenco encabezado por Albert Finney. Ahora, casi 43 años después esta misma historia regresa a la pantalla grande bajo la visión del actor y director Kenneth Branagh, contando con un elenco de primer nivel tal y como lo hiciera su predecesora, además de los grandes avances tecnológicos de nuestra época. Sin embargo, el resultado es muy diferente y se nota demasiado.
Asesinato en el Expreso de Oriente nos narra la historia del detective más famoso del mundo, Hércules Poirot (Kenneth Branagh) quien por alguna razón tendrá que viajar en el expreso de Oriente, un tren de pasajeros de lujo que atraviesa toda Europa desde Estambul hasta París. Este viaje cuenta con la singularidad de tener muy pocos pasajeros, los cuales son gente “importante” dentro del viejo mundo europeo. Durante el viaje, se lleva a cabo el asesinato de uno de estos pasajeros, además de que por cuestiones climatológicas, el expreso se verá detenido por varias horas, por lo cual el famoso detective decidirá tratar de resolver este asesinato.
La película tiene el beneficio de contar con una historia interesante, en este caso me refiero al material en cual se basa ya que posee un gran mensaje sobre la naturaleza humana y las circunstancias bajo las cuales ésta puede ser modificada, para bien o para mal. El problema es que ésta adaptación no es buena, ya que la explicación del problema y su resolución se sienten excesivas y redundantes. Un factor muy notorio es el estilo visual que el director decidió utilizar para este filme pues todo se ve y se siente muy exagerado, muy teatral; con sobreactuaciones por parte del elenco, pero específicamente de su personaje.
Como mencioné anteriormente, el elenco es de primer nivel pues está formado por actores y actrices como Johnny Depp, Michelle Pfeiffer, Penélope Cruz, Judi Dench, Willem Dafoe, Derek Jacobi, Daisy Ridley, Leslie Odom Jr. o Lucy Boynton. Desafortunadamente ninguno de ellos sobresale ni ayuda a crear verosimilitud dentro de esta caricaturesca versión de tan famosa historia, lo cual es un gran desperdicio de talento. A pesar de esto no todo es negativo, ya que el ritmo que posee es adecuado para no cansar ni aburrir a la audiencia con el proceso de investigación ya que logra entretener, destacando el uso de la fotografía, pues con gran creatividad logra obtener libertad en un espacio tan reducido como lo es un tren.
Es una lástima que esta película tenga buenos elementos que podrían haber sido mejor explotados y que al final, solo resulte ser una película que funge como lucimiento para su protagonista —y director—, y ni siquiera así funcione del todo. Porque a final de cuentas, cuando el espectador abandone la sala de cine, olvidará lo que vió.
- Fotografía
- La historia en la que se basa
- Adaptación
- Elenco desperdiciado