El Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) se viste de gala en su decimoquinto aniversario con una imagen que alude a la tradicional fiesta de los quince años: un rito de pasaje entre la infancia y la madurez.
En esta edición, además de celebrar a los talentos de la cinematografía nacional e internacional, el FICM conmemora la trayectoria del festival mismo. El diseño de Rodrigo Toledo, quien ha sido la mente creativa detrás de la imagen del festival desde sus inicios, nos invita a unirnos a esta fiesta, a recordar el pasado y a anticipar con emoción el futuro.
En entrevista, Rodrigo Toledo nos da detalles de la imagen y del camino para llegar a ella.
¿Por qué decidiste tomar el camino de la quinceañera para esta imagen?
La interpretación es directa y sin excusas: es una fiesta de quince años. Decidí tomar ese camino también porque la celebración de los quince años representa una especie de fiesta social mexicana especial. Además, año con año, la imagen del festival pretende ser algo muy alegre, positivo, optimista. El resultado, en este caso, fue una imagen muy inocente y, precisamente, alegre.
En este sentido, ¿su carácter lúdico y de fiesta mexicana influyó en la elección de colores?
La paleta de colores responde a ambos sentidos que mencioné: tanto en el sentido “mexicano” —entre comillas—, como en el sentido de tratar de tener algo muy alegre y muy positivo. Ciertamente, los colores que conforman la imagen son colores muy básicos, colores como de papel de china que verías colgado en una celebración de quince años.
¿Cómo fue el proceso de construcción de esta imagen?
Fue raro. Al fin y al cabo es una imagen muy sencilla, pero decidir abordarlo por el tema de la fiesta de quince años, me hizo dar una vuelta larga. A diferencia de como es la imagen, yo quería hacer algo un poco más hacia los tonos de las fiestas y cosas relacionadas a los quince años tradicionales: cursis y apasteladas. Incluso me fui a una exposición “Expo Mis Quince”, en el World Trade Center, a ver todas las cosas que había. Aunque quería captar la esencia cursi y apasteleada de la que te hablo, no lo logré. Todo lo que salía no llegaba a donde yo quería. Entonces agarré otra dirección. Decidí simplemente mantener el tema y darle una cosa más de ilustración sencilla.
Todas las imágenes anteriores han tenido un tono un poco retro en su concepción gráfica. Esta, si se puede hablar de lo mismo, fue un poco inspirada en ilustraciones, muy indirectamente, de artistas mexicanos de hace muchos años, particularmente de Miguel Covarrubias.
Después de realizar tantas imágenes del FICM, ¿te has encontrado sin ideas? ¿Cómo logras generar propuestas frescas para un tema que llevas realizando desde hace tantos años?
Ciertamente, siempre se trata de reinterpretar el mismo tema, pero también siempre hay algo nuevo y un momento diferente que pensar. Afortunadamente, las ideas van haciendo colita y se van formando, es decir, ya hay ideas nuevas para la imagen de la edición 16. Se vuelve un ejercicio interesante de re-interpretación y creatividad.