Crítica de ‘Attraction: La Guerra Ha Comenzado’

Este fin de semana se estrenó Attraction: La Guerra Ha Comenzado, una cinta rusa escrita por Oleg Maovichko y Andrey Zolotarev, contando con la dirección de Fedor Bondarchuk. Aquí seremos testigos de cómo (por accidente) una nave alienígena se estrella en territorio ruso después de que sufriera daños debido a una lluvia de meteoritos. El ejército ruso decide poner en cuarentena la zona para prevenir cualquier percance, pero el problema surge cuando ésta situación incomoda al pueblo ruso, quienes desean que estos seres se vayan del planeta a toda costa, desatando así una serie de conflictos —donde algunos funcionan y otros no— que pondrán a prueba nuestra tolerancia como especie.

Siempre se ha dicho que por naturaleza, el ser humano teme a lo desconocido, a aquello que no logramos entender y aquí no es la excepción. Se nota a leguas que el director trata de emular la crítica social que otros filmes del género ya han presentado con anterioridad, siendo District 9 el ejemplo más evidente, pues es casi la misma trama, con sus respectivos cambios argumentales para hacerla mucho más “agradable” al público. El problema de ésta cinta recae en que no saben qué historia quieren contar ya que se mezclan diversos géneros, sin apoyarse en uno de forma completa. Lo que en un inicio podría haber sido una interesante película de ciencia ficción con crítica política y social, se termina convirtiendo en una especie de Twilight que involucra uno de los romances más forzados que he visto en la pantalla grande. Además del cambio de personalidad que sufren muchos personajes sin una explicación realmente lógica, solo para hacerlos encajar con ciertos puntos narrativos, es algo realmente frustrante y decepcionante.

Attraction es una cinta que aspiró a mucho, pero debido a su convencionalismo y falta de profundidad, queda lejos de formar parte de las grandes películas del género que sí han logrado aportar algo al espectador, desde una profunda reflexión hasta una tarde de gran entretenimiento. Ésta cinta no logra nada de eso y probablemente nunca más volvamos a escuchar de ella.